miércoles, 20 de febrero de 2013

Pallejá

A orillas del Llobregat  
está un pueblo rural


con vistas a Montserrat.
En el viví de zagal
nací en una casa,
en estación de brasa.
Traen bellos recuerdos.
Y también desacuerdos.
Por sus calles y gentes
amigos y parientes.
De nombres y apellidos,
por todos conocidos.
Familias ancestrales
y leyendas dragonales.
De amores trágicos,
de amores mágicos.
Invita a visitar
este u otro lugar.
La iglesia centenaria
la Santa Eulalia.
Y su castillo famoso
restaurado hermoso.
Y del ayuntamiento
y de la Molinada
del mismo arquitecto.
Sus bosques y montañas,
con sus viejas cabañas,
de aguas manantiales,
y noches celestiales.


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