viernes, 30 de mayo de 2014

Cincuentenario del Noviciado de Pallejá

Hay que viajar en el túnel del tiempo y de los recuerdos para conocer este emblemático edificio, que ya pertenece a la historia de Pallejá.
En los finales de los 50 y primeros de los 60 del siglo pasado, una familia de empresarios de Barcelona se fijó en esta pequeña, acogedora y tranquila población, (por aquellos años ya venían a veranear o tenían una segunda residencia personas adineradas de la capital). Esta familia eran los Sres. Casanovas, empresarios de la industria “botonera”, poseían una fábrica de botones en la C/ d´En Blanco, al lado de Sants (Barcelona) le echaron la
vista a una loma que hay de camino a la montaña de las Planas, tenía un buen camino ya que se transitaba para acudir a una “cantera” o explotación minera que había en esa montana. En aquellos días Pallejá se había caracterizado por sus talleres, fábricas industriales, artesanales y la producción agrícola.
Los Sres. de Casanovas empezaron las obras de este emblemático edificio, (en el habían guardado sacos de botones, o sea que les sirvió de almacén). El destino hizo que los Sres. Casanovas se arruinaran económicamente y la edificación junto a los terrenos fuera comprado por la orden religiosa de las Capuchinas de la Madre del Divino Pastor a través de la mediación de Sor Ines Riera, (un dato a mencionar es que la finca carecía de agua y el Sr. Josep Figueras realizó la canalización desde los depósitos de Can Seix hasta allí).
Las obras se terminaron quedando una torre de estructura arquitectónica de dos pisos, rodeada de jardines y un claustro, huertos y bosques de pinos, (cuidados por el hortelano y su familia que vivían en una casa a escasos metros, la familia de hortelanos eran los señores - El Sr. Rodolfo Y la Sra. Julia. Padres del Fito, la Conchi y la Julia. Eran de Reinosa – Cantabria), así la torre de los Sres Casanovas dando un giro pasó a ser conocida popularmente como “El Noviciado”.
Esta casa fue inaugurada en mayo de 1964 con el objetivo de acoger a las jóvenes que sintiendo la llamada del Señor desean seguirlo al estilo del P. José Tous.En la actualidad hay una piscina y un campo con cestas para el baloncesto.
Durante las obras y su terminación fue en lugar de juegos y excursión por parte de los niños y jóvenes de Pallejá. Habiéndolo muchas anécdotas que no mencionaremos.
Y durante todo estos años, lugar de ejercicios espirituales para jóvenes venidos de diferentes colegios públicos y privados.
Historia de la Orden religiosa Capuchinas de la Madre del Divino Pastor
El 27 de mayo de 1850 el P. José Tous y Soler, confiando en el beneplácito de Dios, se lanzó a una audaz historia que nos legaría un rico patrimonio cultural y espiritual, poniendo los cimientos en Ripoll. Fue en esta villa, donde el Venerable Padre, hombre intrépido y sencillo al mismo tiempo, firme y alegre -bajo el manto azul de la Madre del Divino Pastor- inició una Obra que daría mucha gloria a Dios y tendría un futuro prometedor, primero en Cataluña y después en otros lugares del mundo.
Así fue el inicio de esta Fundación: la degradación moral en que quedó la infancia, después de la revoluci6n de 1835, era evidente principalmente entre las niñas. Movido por su espíritu evangelizador, el P. José, juntamente con las religiosas exclaustradas Isabel Jubal, Marta Suñol y Remedio Palos, emprendió la obra dedicada a la educación cristiana de las niñas.
La capilla reformada.

martes, 14 de enero de 2014

Hay una nueva estrella Chary Silice

Chary
 

Los que te hemos conocido,
hemos visto tu bramido
de mujer guerrera

con espirito de motera
rodando sobre tu montura
con reluciente armadura
la estrella brillar
igual que la del Vivar
tu radiante sonrisa
como la fresca brisa.
Hoy se te apagó
la vida te abandonó
el cuerpo queda en tierra
al espíritu destierra
marchando junto a las estrellas
a partir de hoy, cada noche destellas
Por que sigues con nosotros
igual que muchos otros.


José Portillo

jueves, 2 de enero de 2014

El campanario

El campanario


Mari Carmen, subimos al campanario
Pepito, Gloria y yo.
Mari Carmen subimos al campanario.

Son muchas las escaleras
de caracol campaneras,
nos alumbran las teas.

Mari Carmen la del pelo ensortijado,
Pepito el del pescado,
Gloria la del alguacil,
y yo el más delgado.

Para darle vida al horario
vaya el tiempo andante
juntos subimos al campanario
y el reloj alegre cante
Los cuartos, las medias
los tercios y las enteras.

El campanario es de Santa Eulalia
y las tareas
de Mari Carmen, Pepito, Gloria y mías.

1970 - Josep Portillo